[justify]Después del intento fallido de la toma de la bastilla, los gobernantes de Francia afianzaron su poder frente al pueblo, en un acto de equilibrar el poder entre las naciones, concretaron la Santa Alianza, con los reyes de España, logrando de esta manera, mantener una relación bastante tensa, con los otros imperios.
Para Francis posiblemente el cambio que más le había “afectado”, fue sin duda la instauración de la Santa Inquisición, y es que si bien la Inquisición medieval, (organización de la que se derivaron todas las demás), fue fundada en 1184 en la zona de Languedoc (Sur de Francia), esta no había tenido tanto peso en comparación a su ahora presente.
-Por Diu parece que en vez de avanzar retrocedí en el tiempo-dijo suspirando, mientras sostenía en su mano derecha una copa llena de vino y bebía un poco de su contenido.
Su vida ahora era un poco más complicada, antes podía ir y venir del palacio divertirse, disfrutar de los placeres de la vida y sin ningún problema, lo peor que podía pasar (al menos a él) era que lo enviaran a un convento y para ser realistas, eso nunca funcionaba con Francis.
Sin embargo los castigos de ahora resultaban más severos. Coloco la copa sobre la mesa de la habitación, se dirigió a la ventana y se sentó sobre la orilla del balcón posando su espalda contra la pared, mientras casi por instinto poso su mano izquierda sobre su pecho sintiendo la cruz de plata que había pertenecido a su antigua amiga, protectora y ...
- Jeanne-susurro-Nunca la olvidaría y ella era una razón más para detestar a esa Institución, que de manera cruel había terminado con su vida. Si por el fuera la Inquisición no permanecería sobre Francia, pero triste mente “no se mandaba sólo” y tenia que seguir las órdenes de sus reyes.
“Aunque no por ello”-pensó-“significa que debo seguir las órdenes de la inquisition”-sonrió corruptamente. Después de todo siempre y cuando tuvieras cuidado su “supresión podía ser evitada”. Ya que jamás cambiaria su forma (libertina) de vida. Observo los jardines del palacio, todo parecía tranquilo en Versalles.
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